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Reciben Margarita de Orellana y Alberto Ruy Sánchez homenaje al Mérito Editorial en la FIL

Sinopsis: 
La distinción tiene la finalidad de destacar la visión y el oficio de esta figura fundamental en el mundo de los libros

 

Los editores de Artes de México, Margarita Orellana y Alberto Ruy Sánchez, recibieron de manos del Rector General de la Universidad de Guadalajara (UdeG), doctor Ricardo Villanueva Lomelí, el reconocimiento al Mérito Editorial que entrega la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL 2023).

 

Durante esta ceremonia, la Directora de la feria, Marisol Schultz Manaut, expresó que este premio, especial para la feria, en este año fue “para una dupla fantástica en el medio editorial mexicano que ha construido un proyecto precioso en el sentido más amplio de la palabra, ese prodigio llamado Artes de México”.

 

“Con el amoroso cuidado del detalle, la vocación de Artes de México, al visibilizar las maravillas del arte popular mexicano, ha creado ediciones de las que uno puede admirarse del talento y creatividad de nuestros artistas, así como aprender técnicas, tradiciones y legados que perduran para las nuevas generaciones. Asomarse al arte de la mano de la historia, las voces, la arquitectura o los espacios de los personajes que contribuyeron, y de aquellos que los coleccionaron, son también detalles que se van hilvanando para compartir sus secretos con la curiosidad ilimitada de quienes somos sus lectores”, declaró.

 

Añadió que desde su primer número, Artes de México se caracterizó por ser una obra de arte en sí misma; nació en una época en la que el medio cultural y la sociedad mexicana se exponían a un escrutinio global.

 

“La de Artes de México es la historia de muchas editoriales en nuestro país que han debido enfrentar crisis y vaivenes, sobre todo económicas; pero la decisión de un nuevo Consejo directivo de designar a Alberto Ruy Sánchez al frente de ese desafío, fue un acierto que empezó a rendir frutos desde el principio, siempre en una mancuerna indivisible con Margarita de Orellana”, abundó Schulz Manaut. 

 

Al agradecer la distinción, Margarita de Orellana compartió que es tanto lo que tienen que agradecer que su historia editorial podría ser simplemente una lista de todo lo que han aprendido, no sólo en los 35 años que han hecho Artes de México, sino mucho antes.

 

“Hemos publicado a más de mil autores y a más de mil artistas; hemos vendido más de ocho millones de ejemplares, pero nuestro catálogo, también nutrido y coherente, no representa ni la mitad de los libros que hubiéramos querido haber publicado. A la certeza de que nuestro proyecto era necesario, como habíamos sentido a la hora de comenzarlo, se ha sumado con el tiempo esta sensación de que hay tanto urgente por hacer”, comentó.

 

Dijo que tal vez un editor se define por esta interminable comezón del espíritu y que han defendido su oficio, un rasgo que admiran en los mejores editores.

 

Alberto Ruy Sánchez dijo que tal vez editar es agradecer, por lo que su agradecimiento a Margarita es permanente; recordó que a ella lo unió, desde su primera conversación, la letra impresa, lecturas comunes, la belleza física de ciertos libros y la curiosidad por conocer los diversos Méxicos.

 

“Todo lo que hemos hecho juntos, y por separado, ha resultado muy divertido. Nuestro catálogo es una constelación de afectos que detrás llevan ideas; son destellos de preguntas que hemos planteado a la diversidad cultural de México. Hemos hecho de la indagación cultural de Artes de México un proyecto de un profundo nacionalismo, pero muy cosmopolita”, precisó. 

 

Añadió que si bien han abordado todo el país, Jalisco ha ocupado un lugar central: gracias a José Trinidad Padilla López, a Raúl Padilla López, quien lo invitó a inaugurar como autor su librería Don Quijote y a la primera edición de la FIL asistió como autor y editor. 

 

“Fue aquí donde se vendieron las primeras 52 suscripciones de Artes de México, cuando nuestra revista-libro era un proyecto. Rendimos aquí un homenaje agradecido a Raúl Padilla por tantas cosas, entre las cuales su aprecio sostenido a nuestro trabajo, su generosa curiosidad por nuestra aventura y sus consejos siempre precisos y respetuosos”, comentó.

 

El investigador Alfonso Alfaro dijo que este reconocimiento es un aliciente para el futuro, para Alberto, Margarita y Artes de México, dado lo que han hecho, lo que podemos esperar del impulso que construyeron y lo que están haciendo.

 

“Hace 70 años surgió Artes de México, hace 35 años están al frente de este proyecto y desde hace 25 colaboran estrechamente con la FIL; es una larga trayectoria de colaboración entre dos organismos culturales muy semejantes, ambos han logrado conectar las corrientes, los movimientos que fluyen en la base de la pirámide social y cultural del país”, apuntó Alfaro.